Carmelo Rodero Reserva es un tinto elaborado por Bodegas Rodero, en Pedrosa de Duero (Burgos) dentro de la D.O. Ribera del Duero.
Se trata de un tinto muy rico y con cuerpo, producido a partir de uvas Tinta del país (90 %) y Cabernet sauvignon (10 %), con una crianza de 21 meses en barricas de roble (además de 2 años más en botella, para que termine de perfilarse).
El resultado es un producto estructurado y elegante, carnoso, de color rojo picota, con aroma a fruta madura y vainilla, y acidez en su punto. Todo ello ayuda a que se beba con gusto: es goloso.
Y, mejora con el tiempo. Es un placer guardar botellas (que pesan más que las habituales) y abrirlas pasados unos años.
Tiene 14,5 % de graduación alcohólica, y puede comprarse por unos 30 € (los precios están subiendo, sobre todo a nivel de distribución).
El maridaje, como en todos los buenos vinos, es amplio, combinando muy bien con ibéricos, carnes, quesos curados, guisos especiados, etc.
Recientemente he vuelto a abrir botellas de las añadas 2014 y 2017: en ambos casos el vino cumplió las expectativas. Ahora están en el mercado 2018 y 2019.
Me gusta esta bodega, una de mis preferidas (la he visitado varias veces) lo cual se nota en las botellas que guardo de diferentes cosechas, tanto del reserva aquí presentado como de su crianza, el 9 Meses y el de gama más alta Carmelo Rodero TSM (de este hablaremos otro día).
Carmelo Rodero es una bodega familiar en la que el fundador ya tiene a su lado, en el día a día, a varias de sus hijas. La sucesión, por tanto está asegurada.
Y, un último comentario. Siempre que voy a esta bodega acabo almorzando en el restaurante Asados Nazareno, en Roa (a pocos kilómetros). Si queréis probar el mejor lechazo, ahí podéis encontrarlo.
Saludos cordiales a todas y todos, y bebamos con moderación.
@vinosmuyricos
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